Los acreedores de Grifols han dado su consentimiento a la reorganización del grupo de hemoderivados para que el fondo Singapur GIC entre en la capital de Biomat USA, su filial estadounidense, y contribuya con 840 millones de euros (990 millones de dólares) que se destinarán a reducir la deuda. Según informa Grifols, el 87,9% de los tenedores de los cédulas hipotecarias, el 81% de los no garantizados y el 93,8% de los aseguradores de su préstamo sindicado aprobaron la operación, además del BEI. . Ahora faltará el permiso del Comité de Control de Inversiones Extranjeras de Estados Unidos para sellar el acuerdo. GIC controlará el 23,9% de las acciones de Biomat pero sin derecho a voto en el consejo de administración.
El objetivo final de la operación es la incorporación de GIC, a través de un paquete minoritario, en la capital de Biomat, que seguirá siendo gestionada por Grifols, empresa que mantendrá la gestión y funcionamiento de los 296 centros receptores de plasma en Estados Unidos. Estados Unidos Estados Unidos. La inversión de GIC servirá para reducir la deuda financiera de Grifols, que en el primer trimestre ascendió a 6.200 millones de euros, un múltiplo de 5,1 veces el EBITDA de la compañía derivado de las últimas adquisiciones.
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Grifols cree que la aprobación de la transacción supera con creces las necesidades de la compañía. «El alto índice de aprobación muestra el alto grado de confianza de los principales bonistas y prestatarios en nuestro modelo de negocio sostenible a largo plazo, así como en nuestro compromiso de desapalancamiento de nuestros ratios», dijo en un comunicado de Alfredo Arroyo, director financiero de el grupo.
Tras la operación, Grifols seguirá utilizando la red de recogida de plasma Biomat para obtener materias primas para la producción de plasma medicinal a través de un contrato a largo plazo. GIC será, a su vez, accionista a largo plazo de la compañía estadounidense y un socio importante de Grifols, comprometido con el desapalancamiento en los próximos años tras haber implantado una importante política de adquisiciones.
El pasado mes de marzo Grifols anunció la adquisición de 25 centros de plasma en Estados Unidos a BPL por 314 millones de euros (370 millones de dólares), mientras que en abril anunció a Kedrion la adquisición de otros siete centros por 46,5 millones de euros (55,2 millones de dólares). A estas dos inversiones para garantizar la recogida de plasma se suma la compra de la empresa biotecnológica GigaGen, especializada en el desarrollo de fármacos bioterapéuticos recombinantes, en la que había participado desde 2017 y de la que adquirió el 56% del capital que no tiene control en marzo por un importe de 67,3 millones de euros (80 millones de dólares).
Gracias a la expansión internacional de la última década, Grifols se ha convertido en un grupo con 24.000 empleados y presencia en 30 países. Pese a la operación anunciada este lunes, el precio siguió cayendo y en las 10,50 marcó una caída del 0,7%, en línea con la evolución del año, en el que sus existencias pasaron de 24,09 a 20,44 €, un 15,15% menos.