
La actual mayor preocupación de Macri tiene nombre y apellido, Ciudad de Buenos Aires. Alquiler: que siga siendo de PRO. En este asunto no anduvo con rodeos frente a Ricardo López Murphy que observó, no sin cierta sorpresa, la vehemencia argumentativa del ex presidente. Y no porque estuviera apurado por salir a atender los activos comprometidos a los que lo obliga su militancia en FIFA, a donde fue luego de este encuentro. López Murphy defendía su derecho aspirar a la jefatura porteña, que Macri quiere para su primo Jorge, que corrió a la Ciudad con licencia de la intendencia de Vicente López. Un enroque de multas de 2021 del que no fue nada ajena Patricia Bullrich, visiblemente ascendente presidenta y precandidata del PRO. Bullrich y Murphy compraron un acuerdo que eriza esas sensibilidades porteñas.
Pero quizás la reacción que sorprendió a Murphy se ba al apuro de Macri para bloquear la posibilidad de que Martín Lousteau podría postularse con aspiraciones a este surco, para que los radicales también se sienten herederos con derechos. Larreta, ahora más lejos de Macri, lo muestra a Lousteau como su aliado más cercano, de la mano de Angelici y de Emiliano Yacobitti, vicerrector de la UBA. Es más difícil de describir que de entender. Sobre todo si se hace memoria: López Murphy supo estar cerca de Larreta, pero ahora se inclinó por Bullrich. Y si se interpreta que este enroque tiene que ver con el ascenso de Bullrich, (¿y el descenso de Larreta?) que no abandonó de anotar las encuestas. No es foto sino pelicula y por eso Larreta no deja de proyectar a su ministro de Salud, Fernán Quirós, del PRO, y trata de afirmarse en continuas recorridas por el Interior para anudar alianzas locales. Sus exégetas dicen que esa estrategia, que no practicó el año pasado, le está dando réditos verificables en las encuestas.
Estos reacomodamientos no llaman la atención si pone un foco en el sistema inestable de alianzas que ha establecido en la Argentina como producto de la pérdida de peso específico de los partidos políticos. El peronismo no se sorprendió de la actividad de estos trapecistas porque históricamente nunca fue un partido sino un movimiento con límites borrosos, por izquierda y por derecha, en el que entrar o sucio no tiene el costo de otras organizaciones más rígidas.
En oposición, salvo el radicalismo que tiene una larga historia, también tienen un origen aluvional que aglutinan en torno a una candidatura ascendente, como lo fue la de Macri en 2015, articulada por el enfrentamiento con el oficialismo de entonces o el actual.
La Ciudad ha sido la plataforma desde que Macri proyectó allí en manos del PRO, su partido, desde 2007. En 2023, la elección local se hará al mismo tiempo que la presidencial. Larreta está siendo acusado por Macri de que está dispuesto a sacrificar ese predominio en el altar de una alianza con una porción del radicalismo en la que sobresale Lousteau.
Está claro que lo que se discute ir mas alla de la ciudad. Aquí entró en escena la foto de Bullrich con figuras de alto vuelo del radicalismo y el infaltable Emilio Monzó en plena Vendimia mendocina, adonde estaba Morales, pero que no fue invitado a posar.
La foto de “familia” mostraba, entre otros, al gobernador correntino Gustavo Valdés; el ex gobernador mendocino Cornejo; el bonaerense Facundo Manes, el cordobés De Loredo; la senadora Losada, con aspiración a gobernadora de Santa Fe. Todos los rodeando una muy entusiasmada Bullrich. Muchos se promocionan a sí mismos como productores de esa foto, pero el stímulo fue indudablemente radical. El objetivo: enviar un mensaje claro a Gerardo Morales de que tiene dificultades para liderar el partido. A no, objetar el apuro de Larreta por acercarse a Morales ignorando esta compleja trama que con los radicales no se puede ignorar. En el partido se dicen las dos cosas, aunque de por sí, la sola presencia de Valdés y de Cornejo pasan clara señal de un crecimiento paralelo: el de los radicales que creen que Bullrich es, hoy por hoy, la opción más conveniente para Cambiemos .
Morales no piensa igual. Esta semana se lanza en el Gran Rex como presidencial para mostrar músculo. Allí también exhibía una foto, con Larreta.
Facundo Manes se recalcula: ahora se presentó como «Javier Milei» pero del sistema. En otras palabras, así como el libertario representaría el “antisistema” (aunque no lo es, más bien todo lo contrario), el neurocientífico aspiraba a ser un referente distinto pero no un antipolítico como Milei. A camino angosto y dificil de recorrer para Manes.
Este panorama debe completarse con la posibilidad de que en las primarias, que all aspiren a que funcionen como el gran ordenador de la oposición, las candidaturas a legisladores y otros cargos municipales y locales no compartirían, como ocurrió en 2015. Esta diferencia es fundamental.
Entonces, Macri se enfrentó con Ernesto Sanz y Lilita Carrió en unas PASO que estaban decididas de antemano, pero sirvieron para consolidar el acuerdo que expresaba en las listas comunes de legisladores nacionales en todos los casos.
El nombre del mendocino volvió de repente al primer plano. Algunos picaros lo mencionaron como compañero de fórmula de Bullrich, versión que Sanz negó de plano, como también negó Patricia que Domingo Cavallo, con quien admitió se reúne periódicamente, fuera de su asesor económico.
Sanz está trabajando para elevar el perfil del radicalismo en esta negociación. Algunos vieron su impronta en aquella foto de la Vendimia. Pero lo central es que el ex senador ahora está esperando que Macri regrese para entrevistarse con él. La ultima vez que vieron, la cosa termino mal.
Fue cuando se lanza el primer libro de Macri, llamado «Primer Tiempo». Como ahora Murphy con Macri, hubo también sorpresa por la contundencia de la discusión. Pero en este caso, el sorprendido fue Macri. Sanz, se dé, argumentó que no debió haber un «Segundo Tiempo» y que otro enfrentamiento electoral entre Cristina-Mauricio fue una de las peores señales de involución política que se pudo dar hacia adentro y hacia afuera. ¿Qué habría respondido el expresidente? Que lo querían eliminar (no habló de proscripción porque en ese tiempo esa palabra no estaba tan usada como ahora por Cristina Kirchner). Tras aquel cruce, Sanz no fue al lanzamiento de aquel libro. Sello del segundo.
Ahora, espero volver a la discusión con las credenciales de que en 2015, junto a Carrió, le dieron a Macri la luz de ventaja sobre Daniel Scioli.
Más historias
Errores comunes al solicitar un crédito hipotecario en Veracruz
Consejos para utilizar tu crédito hipotecario en Jalisco: manera responsable, evitando problemas
Cómo obtener un crédito hipotecario en Morelos para comprar un apartamento