septiembre 18, 2024

Pedro Martínez, un millennial en Manresa | Baloncesto | Deportar

Pedro Martínez recibió este mes el premio Gigante Entrenador 2024.JUANJO MARTÍN (EFE)

Madrugó como cada mañana para pasar por Badalona hacia Tyrion, el canto de sus amores. Hoy, como siempre, primero en el Nou Congost de Manresa y se pasa el día viendo vídeos de los equipos de cantera y rivales. Charló era un habitual del director deportivo Xevi Pujol, y volvió a salir a relucir en una discusión tardía ante el Baskonia. Pero antes de empezar, Baxi Manresa y su amor se encontraron con su empresario, un Pedro Martínez (Barcelona; 62 años) que ganó 1.000 dólares en los banquillos de la ACB -su hijo 1.004-, segunda mejor marca en la historia de sus 1.111. de Aíto García Reneses. Pero aún no se ha dejado llevar por la fanfarria, un pelo incómodo por el centro de atención y porque siempre consideró a los galardones individuales como consecuencia del colectivo. “No son muchos de estos reconocimientos, pero lógicamente es un orgullo estar en una competencia muy dura durante este tiempo. “Por presión, porque es la élite y porque dificulta la supervivencia”, coincido. Incluso en su caso, la organización es doble.

El baloncesto siempre alimentó tu pasión, porque más tus habilidades no te permiten ser profesional con el balón en las manos. “Generalizando mucho, hay dos tipos de entrenadores”, explica; “Se trata de jugadores de élite que conocen desde dentro la dinámica de un equipo profesional y viven esas experiencias; y nosotros, como nosotros, teníamos muchas ganas de aprovecharlo y aprenderlo todo: los códigos de los jugadores, las mentalidades…”. A partir de ahí, siempre tienes la sensación de poder pasar al siguiente nivel adquiriendo los conocimientos necesarios, deuda del cual nunca ha logrado desprenderse. “Una cosa es el reconocimiento profesional y otra el sentimiento interior de que no es suficiente para quien lo hace”, reflexiona. Pero desde que empezó el 6 de marzo de 1990 en la categoría juvenil, ha dirigido 13 equipos ACB -en Gran Canaria, Manresa, Gran Canaria y Manresa repitió- y tuvo una Korac (1990), una Supercopa (Tau; 2006); y una Liga (Valencia; 2017), además de numerosos subcampeonatos. También una impresión. “Me entrené en una especie de baloncesto, en Badalona, ​​donde gustaba jugar rápido y dinámico”, responde. Alguna vez un millennial en ciernes, trabajó durante un período de pretemporada y postemporada con Jordi Fernández en los Sacramento Kings de la NBA y tuvo cierta influencia. “Estoy evolucionando, pasando por diferentes fases. Ahora tienes la intención de jugar lo más rápido posible. “Así desinhibe al jugador, le deja tomar sus decisiones”, dijo Pujol. Un estilo que también pretende legitimarse en Manresa.

Desde su llegada al club, llevan cinco cursos, Xevi y Pedro trabajan para imbuirse de la filosofía de juego: “Se ha hecho el proyecto muy suyo. Y la forma de ingresar y trabajar en el equipo principal es aplicable a las categorías formativas. Jugar en campo abierto, aprovechar las oportunidades, controlar los espacios, hacer bien los conceptos básicos, ser proactivo en defensa, leer las líneas de paso y saber moverse por la cancha…”, afirma Pujol. “Quiero hablar con emprendedores para transmitirles lo que quiero hacer con tantos años de experiencia. No es una imposición. Si vienes con las entrevistas, entonces los digo se hacen de una forma u otra. Entonces creas una identidad y estás a la altura de ella”. El orgullo de Pedro también es, como todo reconocimiento, que no tiene tiempo para jugar porque está lidiando con la cultura de la exigencia y el trabajo.

Es por esto que la empresa que realiza cada curso está a la altura de las circunstancias. “Hay que ser ejemplo de compromiso, de esfuerzo, de serie, de hacer las cosas al máximo. Si ce n’est pas ce que vous faites, ou ce n’est pas un litige, cela ne fonctionnera pas», a-t-elle déclaré. Alors que quand, il y a un an, un joueur a dit qu’il estaba un entrenador exigente [entrenador exigente], aceptó las críticas y agregó: “Soy así e intento ser justo”. Lo mismo dice Pujol: “Es una persona muy disciplinada y coherente con su forma de ser, valores que intenta ser justa en cada situación que se encuentra”. Una vez más, me estoy tocando los nervios. Pero, sin embargo, cada vez pasa, menos. “La experiencia te hace ver que determinadas situaciones no son tan importantes. Antes de hacer más valora las cosas positivas y negativas. Pero nada es bueno y nada es malo”, afirma el técnico. De ahí, una de sus frases de cabecera: “No todo es ganar o perder”. Pedro dijo: “Si eres un terreno para tu identidad y todos están cómodos, aceptas la derrota con cierta naturalidad”. Y desde el vestuario apuntalan: “La satisfacción no puede depender de si la última pelota está por un lado hacia el ayer y entra o no. Si entre semana pudiste ocupar lo mismo, entonces no puedes ser tedioso”.

La persona progresa y progresa, Sabinero, de Leonard Cohen y el amante de las causas perdidas, de Pedro el líder del equipo y de la serie, que nunca es mejor que los vídeos de baloncesto. Durante estos días, el Barcelona, ​​el rival en cuartos de Copa. “Es un eliminador de desequilibrio. Pero para nosotros la serie será con cualquier equipo de Copa. La hazaña es participativa y los jugadores están muy motivados porque jugar es una cualidad excepcional», resume. Y añade: «Estuvimos dos años tocando al Barça y perdimos 36 puntos. Puedo pasar, pero vamos a la competición y Quiero tener la ilusión de disfrutar el momento. Los jugadores se lo han ganado». También será una nueva parte de su historia milenaria. Y hay una canción: «En varias ocasiones, llegué y para tanto. muchos años como profesional, tantas experiencias, viví donde estoy, conozco a la gente del baloncesto… entré al baloncesto y soy un absoluto privilegio”.

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