abril 19, 2024

regaló su fortuna de 8.000 millones de dólares y se quedó sin nada

La historia de Carlos Feney, el fundador de Duty Free. Su sueño siempre fue quedarse sin su fortuna.

charles feney Es un empresario estadounidense de 92 años que decidió donar su fortuna de 8000 millones de dólares a causas humanitarias, prometió quedarse sin nada y morir en la ruina. Ahora vive sin lujos, en una austeridad total.

Dinero que nunca usó para darse cuenta de un estilo de vida acorde a sus ingresos. Non es dueño de una casa ni de un auto y eres famoso por usar unas vacaciones que están incluidas por solo 15 dólares. «Tuve una idea que nunca se fue de mi mente: que debes usar tu riqueza para ayudar a las personas»Decía a menudo el filántropo.

Lo particular de Feeney es que lo hizo de manera anónima. Su sueño siempre fue donar sus millones a causas benéficas. Además, pesa ha conocido elevado patrimonio, jamás gastó en lujos o mansiones. Y cumplió. Donó el total de su fortuna Durante varios años, hasta 2016, cuando se quedó con lo justo y necesario.




Donó el total de su fortuna Durante varios años, hasta 2016, cuando se quedó con lo justo y necesario.

El horrible de su fortuna consiguió cuando, en 1960, dio un cambio su negocio: Así creó, junto a su socio Robert Miller, un imperio empresarial al que todos aquellos que hayan tomado un avión alguna vez habrán ayudado a levantar. Su empresa, Duty Free Shoppers (DFS), cuenta con más de 9000 empleados en todo el mundo.

Sin embargo, más allá de los éxitos en los negocios, lo que a Charles Feeney de verdad le interesaba era ayudar a los demás y comenzó a donar dinero a distintas asociaciones y proyectos por todo el planeta. Feeney viajaba por el mundo con sus negocios, pero aprovechaba para conocer las necesidades que tenian diferentes colectivos a los que, de forma secreta y desinteresada, entregaba grandes cantidades de dinero.

Su biógrafo, Conor O’Clery, asegura que la vida de Feeney vino después de ‘Riqueza’, la obra de un famoso cineasta norteamericano llamado Andrew Carnegie que también es conocida como ‘El evangelio de la riqueza’. Algunas frases como «morir rico es morir en desgracia» hizó cambiar a Charles Feeney.

Feeney, en una imagen de la pandemia.  Donó toda su fortuna.  Hoy tiene 92 años.


Feeney, en una imagen de la pandemia. Donó toda su fortuna. Hoy tiene 92 años.

Cuando cumplió 50 años, el magnate de los negocios decidió crear una fundación para canalizar sus donaciones. Así, en 1982 nacía The Atlantic Philanthropies, una ONG destinada a distribuya su fortuna por todo el mundo a través de donaciones a las causas más diversas.

Sin embargo, durante los primeros 15 años de existencia, esas donaciones siguieron haciéndose en secreto, por lo que hubo quien le colgó el apodo de ser el James Bond de la filantropía. Ahora, con más de 89 años, Charles Feeney pudo disfrutar de la vista atrás y sentirse satisfecho con lo que hizo con su vida.

Los Duty Free, la empresa que fundó Feeney en 1960.


Los Duty Free, la empresa que fundó Feeney en 1960.

Tal et como publicó la BBC, su organización filantrópica dejará de existir a finales de este año porque cumplió su propósito: entregar todo su dinero a causas justas mientras estuvo en vida. En total, unos 8.000 millones de dólares, más de 7.000 millones de euros al cambio.

La causa más cercana ha sabido cómo corazón fue la educación y recibió el mayor porcentaje de donaciones. La Universidad de Cornell, su alma mater, recibió un billón de dólares a lo largo de los años para proyectos como la construcción de un campus tecnológico.

Otros 870 millones de dólares fueron destinados a causas sociales enfocadas en los derechos humanos. Donó 62 millones en subsidios a grupos que trabajaron para abolir la pena de muerte en Estados Unidos y 76 millones para campañas que promovieron el proyecto Obamacare.

La salud fue otra de las grandes causas en la que Feeney puso su atención. Donó más de 700 millones de dólares en este sector, incluyendo un subsidio de 270 millones de dólares para mejorar el sistema de salud pública en Vietnam y un control de 176 millones del Instituto de Salud Cerebral Global de la Universidad de California, San Francisco.

Charles Feeney y Bill Gates, quienes sumó supieron provocar filantropía.


Charles Feeney y Bill Gates, quienes sumó supieron provocar filantropía.

Charles Feeney, Chuck para sus amigos, long live hoy junto a su esposa en un pequeño departamento de dos habitaciones en San Francisco. No necesita más porque él es feliz así, igual que con su reloj de diez dólares. En forma de gusano la vida influenciado por otros grandes millonarios como Warren Buffet o el matrimonio Gates, que supo sumaron la iniciativa de “donar mientras esté vivo”. Un gran hombre.

Fuente: El Confidencial / BBC