abril 22, 2025

China lanza plan para reducir dependencia de exportaciones.

https://media.cnn.com/api/v1/images/stellar/prod/china-consumo.jpeg?c=16x9&q=w_800,c_fill

China ha revelado un «plan de acción especial» con grandes aspiraciones para impulsar el consumo interno y mitigar los impactos negativos de los recientes aranceles en el comercio. El enfoque de esta estrategia es consolidar la economía del país y asegurar una menor dependencia de las exportaciones, especialmente en medio de las tensiones comerciales con Estados Unidos.

China ha anunciado un ambicioso «plan de acción especial» para fomentar el gasto interno y contrarrestar los efectos adversos de los aranceles comerciales impuestos recientemente. La iniciativa busca fortalecer la economía nacional y garantizar que el país dependa menos de las exportaciones en un contexto de tensiones comerciales con Estados Unidos.

El plan incluye medidas como el aumento de los ingresos de la población, la implementación de subsidios para el cuidado infantil y la expansión de programas como el de «dinero por chatarra», que incentiva a la ciudadanía a intercambiar bienes antiguos, como automóviles y aparatos electrónicos, por dinero. Estas acciones forman parte de los esfuerzos del gobierno por revitalizar una economía que ha mostrado signos de desaceleración en varios sectores clave.

Desafíos económicos y disputas comerciales

La economía de China se enfrenta a varios obstáculos, como un débil gasto de los consumidores, un mercado laboral inestable y una persistente caída en el sector de bienes raíces. A estas dificultades se suman los recientes aranceles de Estados Unidos, que incrementaron al 20% las tarifas sobre importaciones chinas. En reacción, China impuso aranceles de represalia, impactando sobre todo a las exportaciones agrícolas de Estados Unidos.

Dentro de este marco, los datos oficiales mostraron un incremento del 4% en las ventas al por menor entre enero y febrero, superando levemente el crecimiento del 3,7% observado en diciembre. A pesar de que este aumento fue favorecido por medidas de estímulo fiscal, los expertos advierten que la recuperación puede no ser sostenible debido a los desafíos estructurales presentes en la economía.

Uno de los problemas más constantes es la deflación, que desincentiva el gasto al crear expectativas de una disminución prolongada de los precios. En febrero, el Índice de Precios al Consumidor disminuyó un 0,7% en relación al mismo mes del año pasado, llegando a su punto más bajo en más de un año.

Uno de los problemas más persistentes es la deflación, que desalienta el consumo al generar expectativas de una caída continua de los precios. En febrero, el Índice de Precios al Consumidor cayó un 0,7% en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando su nivel más bajo en más de un año.

Producción industrial y estímulos

El esquema de «dinero por chatarra», que promueve el cambio de vehículos y aparatos antiguos, es una de las iniciativas clave para estimular el consumo. Del mismo modo, los subsidios para la atención infantil tratan de aliviar las cargas económicas de las familias, promoviendo un gasto más equilibrado en el ámbito doméstico.

Proyecciones para el futuro

Las autoridades chinas se enfrentan al desafío de balancear sus metas de crecimiento con las dificultades económicas internas y las presiones externas causadas por la guerra comercial. Aunque las medidas presentadas podrían tener un efecto positivo a corto plazo, los expertos enfatizan que resulta esencial tratar problemas estructurales como la deflación y la dependencia de las exportaciones para asegurar una recuperación a largo plazo.

El gobierno chino enfrenta el reto de equilibrar sus ambiciones de crecimiento con las dificultades económicas internas y las presiones externas derivadas de la guerra comercial. Si bien las medidas anunciadas tienen el potencial de generar un impacto positivo en el corto plazo, los analistas subrayan que será crucial abordar problemas estructurales como la deflación y la dependencia de las exportaciones para garantizar una recuperación sostenible.

Con este plan, China busca demostrar que puede adaptarse a un panorama económico global cambiante, fortaleciendo su economía interna y reduciendo su vulnerabilidad frente a factores externos. Sin embargo, el éxito de estas iniciativas dependerá de su implementación efectiva y de la capacidad del gobierno para superar los obstáculos que limitan el crecimiento.