abril 26, 2024

Duque busca impulsar nueva reforma tributaria en Colombia | Internacional

Duque busca impulsar nueva reforma tributaria en Colombia |  Internacional
Los manifestantes participan este lunes en otra jornada de protesta contra la violencia policial y las políticas económicas del gobierno de Iván Duque, en Bogotá.Carlos Ortega / EFE

El presidente de Colombia vive una época difícil. Iván Duque intenta impulsar una nueva reforma tributaria necesaria para la economía del país, aunque esta vez con más consenso y respaldo que la anterior. No te resultará fácil. 11 meses antes de las elecciones generales, pocos partidos y miembros del Congreso se unirán a las calles en una medida tan impopular. Otro fracaso del ajuste fiscal en el Congreso socavará enormemente al presidente, que afrontará el final de su mandato con muy poca expectativa.

Duque retiró su proyecto más ambicioso el domingo después de cuatro días de fuertes protestas callejeras. Este lunes se reunió con su ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, el ideólogo reformista, en cuestión tras ver fracasar su plan. Los políticos de la oposición piden al ministro que renuncie si no quiere enfrentar un voto de censura. El expresidente conservador Andrés Pastrana también le pidió que se fuera. El asunto está ahora en manos de Duque. Queda por ver si mantendrá a este economista con fama de ortodoxo, muy cercano a Álvaro Uribe en el cargo, o buscará una nueva cara que genere más consenso.

Otro de los ministros interrogados es el ministro de Gobernación, Daniel Palacios. Las protestas, en su mayoría pacíficas, dieron lugar a enfrentamientos entre la policía y los manifestantes. El saldo, por ahora, es de 16 muertos, incluido un agente. A medida que se van conociendo las historias de las víctimas, como la de Santiago Andrés Murillo, un joven de 19 años que, según testigos, fue baleado en el pecho por un policía mientras se manifestaba con normalidad, aumentan las críticas por la acción. . de las fuerzas de seguridad. El video del momento en que la madre del niño identifica el cuerpo de su hijo en la morgue congeló a los colombianos.

Los organizadores del paro que anuló la reforma tributaria, apoyados contra viento y marea por el presidente Duque para tratar de compensar el déficit que dejó la pandemia, siguen a trece y se aseguran de que no volverán a casa. Estos días no han dejado de bloquear las calles y marchar por las calles. El miércoles, un sindicato llamó a otra gran movilización, esta vez para exigir la desaparición de Esmad, la policía antidisturbios colombiana, y la fumigación aérea con glifosato, un herbicida que destruye las plantaciones de coca pero también daña el resto de los cultivos. Las razones ahora son mínimas, lo cierto es que el retiro de la reforma no ha terminado de calmar el alma de los manifestantes.

Los mismos integrantes del Centro Democrático Uribe, del que Duque es miembro, apoyaron la decisión. De cara a las elecciones de 2022, la reforma fiscal habría sido mortal para sus intereses. Ocho de cada 10 colombianos dicen que no votarán por miembros del Congreso que lo apoyen. Uribe, el líder absoluto de ese partido, coincide con el presidente en que es necesario aumentar los ingresos del Estado para extender, por ejemplo, la asistencia social a los más pobres, aunque con él difiera en forma y momento. Duque intentó aumentar los impuestos en un momento muy difícil para Colombia, con una tercera ola muy agresiva de Covid rompiendo récords de infecciones y muertes. La escasez de cilindros de oxígeno solo agravó los problemas.

Duque cuenta con el apoyo de expertos económicos y agencias de evaluación de riesgos en sus planes para aumentar los impuestos. El diagnóstico se comparte en los mítines, el país necesita recaudar más para reducir la deuda y combatir la pobreza y la desigualdad, desencadenada tras la pandemia. Pero la realidad es que el proyecto más ambicioso de su mandato se ha estancado, quizás para siempre, y el camino se ha rebelado contra él. Sobre todo los más jóvenes, que son los que lideraron las protestas, irónicamente con el presidente más joven de la historia de Colombia, que no logró ponerse en contacto con ellos en sus tres años de mandato. El grupo de edad que más apoya al presidente, según las encuestas, es el de más de 50 años.

El vandalismo dentro de las protestas, que ocurre principalmente por la noche, es un problema obvio al que se han enfrentado las fuerzas de seguridad. Hay 457 policías heridos y 364 detenidos, incluidos 30 menores. Para detener esos disturbios, Duque anunció el sábado por la noche que los militares patrullarían las ciudades más quemadas si los gobernadores y alcaldes lo solicitaban. La idea provocó una ola de críticas por temor a un mayor derramamiento de sangre. El siguiente paso de Duque fue retirar la reforma al día siguiente.

Duque tiene por delante varias semanas muy difíciles, en las que está en juego el capital político que le queda. Un nuevo fracaso en las negociaciones obstaculizará enormemente sus últimos meses como presidente de la nación.

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