abril 19, 2024

Fabián Rodríguez Simón: Los problemas de ‘Pepín’ Simón, el hombre clandestino de la justicia argentina | Internacional

Fabián Rodríguez Simón: Los problemas de 'Pepín' Simón, el hombre clandestino de la justicia argentina |  Internacional
Fabián Rodríguez Simón asiste a una misa en la Catedral de Buenos Aires el 25 de mayo de 2019.Enrique García Medina

En Argentina existe una figura denominada «operador judicial». Se trata de la persona que transfiere las presiones o deseos del poder político a los tribunales. Siempre es una figura oscura, conocida y reconocida pero no incluida en las jerarquías institucionales. El abogado Fabián Rodríguez Simón, convocado por todos Reineta, fue el operador judicial de Mauricio Macri. Ahora está huyendo a Uruguay, donde ha solicitado asilo político como víctima de una supuesta «persecución».

Las aventuras de Reineta Provoca malestar en el macrismo y saca a la luz, una vez más, el descaro con el que los últimos inquilinos de Casa Rosada, de ambos lados, han utilizado a los jueces para lograr sus fines políticos e intimidar a sus opositores.

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Reineta Está previsto que Rodríguez Simón comparezca el 17 de junio ante la jueza María Servini para someterse a una investigación, es decir, al interrogatorio que se le realiza a una persona sospechosa que aún no ha sido imputada de ningún delito. Su caso, relativo a supuestas actividades ilícitas para arruinar el grupo empresarial Indalo (de orientación kirchnerista), llevaba dos años abierto sin que se hubieran adoptado medidas cautelares de ningún tipo. En cuanto se enteró de que el ex operador judicial había solicitado asilo y denunció persecuciones contrarias a los derechos humanos, el juez Servini lo declaró en ausencia y el miércoles pidió a las autoridades uruguayas que lo ubicaran y le impidieran salir del país.

El prófugo de la justicia es amigo de Mauricio Macri desde la infancia. El ex presidente usó Reineta a lo largo de su carrera política, siempre en roles delicados: expulsar a los sin techo de Buenos Aires cuando era jefe de gobierno de la ciudad, como abogado cuando Macri aparecía en los «periódicos de Panamá» (lista de fiscales presuntos evasores) y como «operador judicial «durante su presidencia.

Estaba Reineta quien organizó el tormentoso traspaso del poder entre Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri, fue Reineta quien ideó la fórmula para nombrar provisionalmente a dos miembros de la Corte Suprema por decreto sin aprobación parlamentaria previa, y fue él quien supervisó la Lawfare o la guerra judicial de Macri contra su antecesor y colaboradores. Esto no significa que el kirchnerismo no cometió delitos o que Pepín fue el primer «operador judicial». Así es simplemente como parecen funcionar las cosas en Argentina.

La posición de Mauricio Macri ahora es muy incómoda. «Me sorprendió, no estoy de acuerdo pero lo entiendo», dijo el expresidente sobre la fuga de su amigo y colaborador. «Claramente hay una persecución contra mí, mi familia y mis ex funcionarios», agregó. La situación del gobierno conservador de Uruguay también es incómoda, de cara al gobierno argentino por la gestión del Mercosur (Reineta También es parlamentario del Mercosur, la alianza comercial entre Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Venezuela, con Bolivia en proceso de adhesión) y no está dispuesto a seguir en conflicto con Buenos Aires.

La expresidenta y actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner describió Reineta Rodríguez Simón de «apretón en serie de jueces y empresarios» y agregó: «Sólo fue citado para emitir declaración de instrucción por parte de un juez y un fiscal, de quienes se puede decir cualquier cosa a menos que sean kirchneristas. Y pide asilo político en Uruguay». por la persecución. Dicen que somos nosotros los que buscamos la impunidad … «

En conversación desde Uruguay, donde reside desde diciembre, con el periodista Carlos Pagni, el exoperador judicial explicó que no tiene la menor fe en la justicia argentina. Fue pintoresco, en el caso de la persona que había trabajado en el marco de juzgamiento de Mauricio Macri.

El juez Servini investiga Reineta, un hombre de complexión pequeña pero, según sus colaboradores, muy arrogante, debido a una denuncia interpuesta por Fabián de Sousa, socio de Cristóbal López en el Grupo Indalo. De Sousa acusado Reineta cometer actos ilícitos «con el objetivo de provocar el colapso de las empresas que forman parte de ese grupo para su liquidación y venta a bajos precios».

El Grupo Indalo surgió durante el «boom» económico que acompañó parte de la presidencia de Carlos Menem en la década de 1990 y se consolidó bajo la presidencia de Néstor Kirchner, extendiéndose a los medios de comunicación, casinos, petróleo, transporte y agricultura. Su fundador, Cristóbal López, partidario del kirchnerismo, fue detenido en 2016, poco después de la llegada de Mauricio Macri a la presidencia, por una presunta evasión fiscal de 8.000 millones de pesos (unos 80 millones de dólares). El arresto fue cuestionado por el hecho de que la esposa de Julián Ercolini, el juez que lo ordenó, trabajaba como asesora del gobierno de Macri. La Cámara Federal decidió en 2018 liberar a Cristóbal López. En 2019, peritos de la Corte Suprema dictaminaron que la deuda tributaria del Grupo Indalo ascendía a 6.000 millones de pesos y que su pago a plazos había sido pactado y regularizado con la Administración de Ingresos del Gobierno Federal (AFIP).

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